top of page

No Tengo Tiempo



De unos años para acá he estado tomando más consciencia de las veces que digo, “no tiempo tiempo” o cuando me veo en esta necesidad de que algo suceda rápido o inmediatamente.


Como tiendo a caer en los extremos de un péndulo muy fácilmente 🤦🏻‍♀️ procuro poner atención cuando caigo en esto lo más pronto posible sin embargo no siempre lo logro.


En un inicio me comencé a pelear con todo lo que fuera rápido e inmediato 😬 pero hay cosas que definitivamente es una bendición lo que la tecnología y los descubrimientos han logrado para obtener cosas más rápido.


Ejemplos de esto, miles. Poder abrir una llave y obtener agua caliente, estar de viaje y poder tomar mi teléfono para tener una conversación con mis hijos mientras nos podemos ver, trasladarme a un lugar en poco tiempo en auto, camión o avión, miles de ejemplos.


Sin embargo hay otras cosas que creo que la prioridad de la inmediatez o las prisas ha hecho que tome decisiones que no me llevan realmente a donde quisiera.


De esto también varios ejemplos, ¿hago mi meditación o mejor me apuro porque no me va a dar tiempo? ¿Preparo de comer o compro algo rápido porque “no tengo tiempo”? ¿Me tomo 10-15 minutos para platicar con mis hijos o mejor nos apuramos porque no vamos a llegar? ¿Le mando un mensaje a mi amiga o la llamo para ver cómo sigue o mejor me apuro? ¿Me tomo unos minutos para SENTIR como estoy o mejor sigo? ¿Le doy oportunidad a mi cuerpo para repararse o mejor callo el síntoma? ¿Me doy un momento para respirar profundo o mejor sigo?


Por mucho tiempo la respuesta a cada una de estas preguntas fue “no tengo tiempo” debo seguir con los pendientes del trabajo, la casa, los compromisos, etc.


Llegó un momento en que mi cuerpo y mi mente dijeron “¡Basta!”. Y ya te he platicado de mis dos episodios de depresión y creo que la gran diferencia del primero con el segundo fue justo esta.


Que cuando salí adelante de la primera, regresé a las prisas, al vivir hacia afuera y al “no tengo tiempo” o esperar resultados inmediatos. Dejando de tener ese espacio para mi mente y mis emociones por seguir con la inmediatez de los días y las prisas.


En ese entonces logré tomar prioridad de mi rutina diaria de mañana en la que me doy el espacio para visualizar, ponerme en sintonía con el amor y comenzar mi día desde un lugar muy diferente al de la prisa y el estrés por todo lo que hay que hacer en el día. Con diferentes herramientas, no siempre es la misma, puede ser una meditación, respiraciones, escribir, movimiento somático, etc.


Sin embargo, pasé de un extremo a otro. De priorizar mi cuerpo a priorizar mi mente y mis emociones, nada más 🤦🏻‍♀️. Blanco o negro, o uno u otro.


Estos últimos años, unos días cuidaba mi cuerpo con atención, con amor y quería resultados inmediatos y al no verlos me rendía y regresaba al extremo.


De nuevo, hasta que mi cuerpo dijo “¡Basta!”


Y caí en cuenta que la inmediatez y el “no tengo tiempo” volvieron a entrar en mí.


Hoy comparto contigo esto para recordarnos que regalarnos el espacio de cuidar de nuestro cuerpo, mente y espíritu es igual de importante. Que la inmediatez en estos temas no nos lleva a ningún lugar sano.


¿Cuáles son algunas acciones que podemos tomar para dejar de caer en el “no tengo tiempo” o la inmediatez?

  • Prepara tu día desde un día antes. De verdad que por más trillado que se escuche ayuda mucho. Dependiendo de como esté tu día, puedes organizarte para regalarte un espacio para ti, para tu mente, para tus emociones y para tu cuerpo.

  • Es mejor hecho que perfecto. Si perfecto para ti se ve como una hora de meditación, una hora de ejercicio y comer 100% natural y saludable, te invito a hacer las pases con que hay días que van a ser 5 minutos de meditación, tomar 3 respiraciones profundas y quitarle el pan a algo que compraste de comer, por poner un ejemplo. Pero te regalas el espacio si o si.

  • Lleva un registro de tu avance. Pon en tu closet o en un lugar donde lo puedas ver diario, un calendario donde puedas ir marcando los días que si te regalaste el tiempo para ti. Te puedes llegar a sorprender como, aunque unos días son mejores que otros, si sigues las dos recomendaciones anteriores, puedes llegar a sumar más días de lo que tu mente te quiere hacer creer. Con tal de regresar a tu “yo” de siempre y a la zona de confort a la que ya está acostumbrada tu mente, va a hacer todo lo posible por hacerte creer que no estas avanzando. Pero si lo mides, te vas a dar cuenta que si estas avanzando.

  • Pide apoyo. Cuando nuestro carro prende una luz de que algo falla, lo llevamos al taller. Cuando algo se descompone en nuestra casa, le hablamos al técnico. Cuando nuestro hijo necesita apoyo con alguna materia, le ponemos una maestra o clases de refuerzo. ¿Pero cuándo nosotros necesitamos el apoyo? ¿Qué hacemos? Puedes encontrar maestros de meditación, de yoga, de respiración o la herramienta que quieras utilizar. Puedes ir con un nutriólogo(a) o con alguna persona de medicina funcional para tu cuerpo. También sabes que con el tema de las emociones, síntomas y espirituales puedo apoyarte con sesiones 1 a 1 y desarrollar un plan. Con quien tú elijas pero busca apoyo. Puedes ahorrarte muchos dolores de cabeza.

  • Hazlo desde el amor. Es muy diferente hacer las cosas por miedo que por amor propio. Nos han vendido la idea de que amor propio es un spa, un baño con burbujas o un manicure. Sin embargo elegirte todos los días es uno de los actos más grandes de amor propio que podemos experimentar. Cuidar de nuestro cuerpo agradeciendo todos los lugares a donde nos ha llevado y los momentos que nos ha permitido vivir. Cuidar lo que entra a nuestra mente es nutrir la calidad de los pensamientos que vamos a tener mañana. Permitirnos SENTIR nuestras emociones es vivir. Y regalarnos un espacio para nuestra espiritualidad es conectar y sentirnos uno con esa energía que nos sostiene cada respiro de nuestra vida.

  • Ten paciencia. Tente paciencia. Date tiempo y dale tiempo a tu cuerpo, mente, espíritu y emociones de que se reparen y se asiente todo lo que estás haciendo. Al principio puede parecer que no está pasando nada pero ¿cuánto tiempo de no priorizarte ha pasado para llegar hasta donde estas hoy? Los cambios si están sucediendo solamente que aún no los puedes ver con tus 5 sentidos. Pero ya esta sucediendo el cambio, ten paciencia. Si te rindes, jamás llegarás a verlos. Pero si continúas, un día va a parecer que el cambio fue de la noche a la mañana, pero lo que sucede es que le has dado tiempo para que los cambios salgan a la superficie.

  • Reconoce cada paso que das. Es importante celebrar y reconocer cada vez que si has logrado priorizarTE. De esta forma estarás enfocando tu atención en lo que SI estas haciendo y eso es lo que va a crecer. Cada día suma y cuenta. Sigue adelante.

Hay muchas más pero creo que estas creo que son un buen inicio para salir del “no tengo tiempo”.


Deseo te sirvan tanto como a mi me han transformado la vida y si tienes alguna que te ha servido, estaré feliz de leerte y compartirnos formas de priorizarnos.


Vamos juntos en esta experiencia de vida.


Sanas tú, sano yo.


Sano yo, sanas tú.


Sanamos nosotros, sana el mundo.


✨SOMOS UNO✨


Deseo tengas una semana plena y llena de gratitud priorizandoTE desde el amor.

39 visualizaciones0 comentarios

Entradas Recientes

Ver todo
bottom of page